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Desde Pina: el blog de Marisa Fanlo Mermejo

Un viaje doloroso y muy esperado

Un viaje doloroso y muy esperado

Estos días me voy a acordar mucho de ellos, de los pineros cuyos nombres aparecen en la imagen, y de sus familias. Acabamos de llegar a Munich con la Amical de Mauthausen y otros campos y nos llevan al Castillo de Hartheim, donde uno de nuestros vecinos, Francisco Bosque Villanueva, fue asesinado por los nazis.

La historia de ese castillo es espeluznante porque allí se aplicó por parte de los nazis la teoría de la raza, asesinando a compatriotas suyos discapacitados físicos y mentales, pues consideraban que contaminaban la raza aria. Después, usaron ese castillo para gasear a muchas más personas, por ejemplo a más de 400 republicanos españoles.

Elecciones sin alegría

Elecciones sin alegría

Comencé la campaña electoral totalmente escéptica y bastante indecisa sobre qué hacer hoy. Evidentemente era porque el partido que más me representa no está hoy en las papeletas. Y ¿sabéis qué? Que después de todo el lío con los debates lo tuve claro.

Voy a ir con la nariz tapada y sin mucha alegría, pero voy a ir. Porque veo cómo actúan algunos y las pocas cosas que les preocupan. Porque sé lo que no quiero y sé lo que quiero para el futuro. Y lo que quiero no se parece en nada a una bandera rojigualda con un aguilucho.

El que venga detrás, que arree

En política, como en la vida, hay veces que toca elegir entre varias opciones aunque no te guste ninguna. A mí, me ha pasado unas cuantas veces eso en estos cuatro años de alcaldía, pero ninguna me había llevado tanto tiempo como esta última. Una decisión que se resume en dos opciones:

  • No haces una obra que sabes que va a generar muchos gastos y problemas en el futuro si la llevas adelante, lo cual implica renunciar a más de 200.000 euros y pagar el proyecto ya adjudicado y realizado.
  • Haces la obra teniendo que usar el superávit presupuestario del año pasado, no cumples los plazos, no te dan la subvención y además dejas al Ayuntamiento incumpliendo el principio de estabilidad presupuestaria, con un plan económico financiero que hay que elaborar y con una obra que puede generar muchos problemas económicos y de funcionamiento a lo largo de los próximos años.

Como comprenderéis, la única decisión que podíamos tomar era la primera. Y ninguna otra opción surgió por parte de ningún grupo en la Comisión de Urbanismo recientemente celebrada.

Lo más fácil para alguien que haga política cara a la galería, esa política de quedar bien con todo el mundo, sería adjudicar la obra, aún sabiendo las consecuencias, y quien venga detrás, que arree. Sobre todo cuando ya tienes decidido que no vuelves a presentarte a la alcaldía y que ese marrón no te lo vas a tener que comer tú. Lo más difícil, pero a la vez lo más sensato para alguien que se preocupa de verdad por hacer las cosas lo mejor posible, es renunciar al dinero porque las cosas vale más hacerlas bien y pensándolas, que rápidamente y sin pensar en el futuro.

El origen del problema está en una solución que se dio hace más de una década a un problema de vertido precisamente sin pensar en el futuro: al redactar el proyecto de la obra de San Blas, hemos descubierto que la cota de vertido de la calle no da de sí para poder verter por gravedad en el pozo situado en el cruce de María del Ruste con la calle El Sol. Quienes arreglaron en su día la calle El Sol hicieron la conexión al pozo a mayor altura de la debida para tener ellos desnivel suficiente para evacuar, condenando a la calle San Blas a no poder ahora verter, en condiciones, a ese pozo. De hecho, se ha descubierto que esa calle tiene todas las tuberías en carga, llenas de aguas negras que no corren, con los riesgos que eso supone.

La única solución que nos dan para arreglar eso sin tocar otras calles es colocar un pozo de bombeo que cuesta no menos de 30.000 euros y que además no sería subvencionable, ya que al hacer la memoria valorada para solicitar la ayuda que DPZ nos concedió no se sabía que se iba a necesitar. Ese pozo de bombeo, según nos han explicado ingenieros de DPZ, debería ser la última solución a valorar, ya que suelen generar muchos problemas y muchos gastos de mantenimiento que serán ya fijos cada año para el Ayuntamiento.

El problema de fondo de todo esto: la necesidad de ampliar la red de alcantarillado de Pina, ya que a la calle San Blas llegan las aguas negras de todo el “Hogar cristiano” y de todas las calles paralelas a la de San Roque (“Villatocinos”), bajando luego por la calle El Sol hacia la plaza. Demasiado material para una zona con tantos problemas para su desagüe por la falta de desnivel.

Cada cual puede valorar esto como quiera, pero si se renuncia a un dinero es porque se puede perder mucho más que esa cantidad en el futuro; por sensatez y porque lo de dejar herencias envenenadas a quienes vengan detrás es cosa de otros. Aquí, no nos gusta eso y bastante lo hemos sufrido ya. 

El sábado homenajeamos a los vecinos de Pina asesinados en campos nazis

El sábado homenajeamos a los vecinos de Pina asesinados en campos nazis

 

Es necesario no olvidar la barbarie, los crímenes contra la humanidad, y por eso estos días, entre las actividades del Festival Aragón Negro que organizamos en Pina, hemos querido introducir un tema como es la deportación de aragoneses, incluida gente de nuestro pueblo, a los campos nazis. Aquí dejo el enlace al artículo que me han publicado en arainfo.org (Recordar negros crímenes en negros años) y mis palabras en el acto del sábado:
Buen día, bienvenidos Josep San Martín (delegado en Aragón de la Amical de Mauthausen y miembro del Comité Internacional de Mauthausen), Julio Embid (director general de Relaciones Institucionales del Gobierno de Aragón), familias, amigos y amigas. 
Gracias por acudir a este acto tan importante para muchas personas que estamos hoy aquí.
Os explico en primer lugar el desarrollo del mismo. Ahora, vamos a realizar unas breves intervenciones, luego una pequeña visita a la exposición de la Amical de Mauthausen sobre la deportación republicana a los campos nazis y finalmente saldremos a descubrir la placa.
Comienzo mi intervención recordando que el 1 de noviembre de 2005 la Asamblea General de las Naciones Unidas designó el 27 de enero Día Internacional en memoria de las víctimas del Holocausto y en prevención de los crímenes contra la humanidad, ya que ese día de 1945 se produjo la liberación del campo de concentración y exterminio nazi de Auschwitz-Birkenau. 
En Pina, ese mismo año 2005, en mayo, se aprobó en Pleno colocar una placa en recuerdo de los vecinos de nuestro pueblo que fueron asesinados en campos de concentración y exterminio nazis. Hoy, por fin, vamos a cumplir ese acuerdo.
Puede resultar extraño que este acto lo incluyamos dentro del Festival Aragón Negro; no lo es tanto si pensamos en la cantidad de películas, libros, exposiciones y otros productos culturales, que nos recuerdan los crímenes que se produjeron en Europa en los años 30 y 40 del siglo XX. Porque la memoria, tanto la particular de cada uno de nosotros y nosotras como la memoria universal, están en la base de la creación artística. Y hoy estamos aquí para hablar de la importancia de la memoria, de la importancia de recordar, de la importancia de no olvidar los nombres de quienes, como dice la Ley de Memoria Democrática de Aragón, aprobada el pasado año por las Cortes de Aragón, "padecieron confinamiento, torturas y, en muchos casos, la muerte en campos de concentración y exterminio europeos o bajo dominio fascista". 
Un episodio que no debemos olvidar y que es de los más negros de la historia de la humanidad. 
Y hoy estamos aquí para no olvidar a siete personas que sufrieron aquellos crímenes. No sé si recordais el final de "La lista de Schlinder", cuando los actores de la película, los personajes, van caminando tras su liberación y se convierten en las personas reales cuyas vidas estaba contando la película. Pues bien, yo este acto de hoy lo veo como una forma de convertir a las víctimas del nazismo en personas reales, que pasearon por estas calles, que vivieron aquí y tuvieron que abandonar sus casas y sus familias. Y para eso tenemos que nombrar a Emilio Abadía del Ruste, a Pablo Aparicio Conejero, a Benito Blasco Calvo, a Francisco Bosque Villanueva, a Julio Mermejo Miguel, a Alejandro Salvador Cavero y a Teodoro Sanz Gómez. A ellos no los salvó ningún Schlinder y fueron asesinados. Y quienes estamos en las administraciones públicas tenemos la obligación de reparar el olvido de esos crímenes por justicia. Y esa es nuestra intención hoy cumplir con los principios generales de la ONU que defiende la verdad, la justicia y la reparación.
Gracias 

Parque Javier Blasco Zumeta

Parque Javier Blasco Zumeta

Ayer sábado, por fin colocamos el monolito con el nombre de nuestro parque de la arboleda de Pina.

Ya lo hice ayer, después de descubrir el monolito con el nombre, y lo vuelvo a hacer: desde aquí quiero agradecer el trabajo de diseño y de obra por parte de Jesús Blasco Blasco (al que han ayudado otros colaboradores imprescindibles, tanto de la brigada municipal como de fuera de ella). Jesús ha perdido horas de sueño y ha dedicado mucho tiempo a este proyecto en el que ha puesto mucha ilusión y como él no quería hablar, me pidió que explicase yo que en la parte superior del monolito está el plano del parque, con sus caminos, la mota arriba, los campos de petanca, el surco del riego... Esperamos que os guste.

Y aquí dejo las palabras con las que comencé el acto en homenaje a Javier Blasco Zumeta:

"Buen día y gracias por acompañarnos hoy para nombrar por fin a este parque que hemos tenido muchos años sin nombre.

El pasado 30 de marzo, por unanimidad de todos los grupos políticos del Ayuntamiento de Pina y a propuesta de la comunidad educativa del colegio Ramón y Cajal, es decir, de profesorado, padres y madres y alumnado, se aprobó la denominación del parque de la arboleda como Parque Javier Blasco por su labor de estudio y divulgación de los ecosistemas, de la flora, de la fauna, que rodea la Comarca de la Ribera Baja del Ebro y por llevar el nombre de Pina a todos los lugares donde le ha sido posible.

Desde luego, creemos que si alguien se merece hoy este reconocimiento es Javier Blasco Zumeta. Una persona que ha recibido fuera de su pueblo muchos más reconocimientos que aquí, en Pina. Los ha recibido a nivel de todo el estado, como la cruz de la Orden civil de Alfonso X el Sabio en 1996, o de Aragón, como el Premio Medio Ambiente otorgado por el Gobierno de Aragón en 2004, o de otras entidades diversas. En Pina se le concedió en 1995 la Insignia de Oro de la Villa y ahora, que se acaba de jubilar como maestro, es un buen momento para recordar su trabajo de tantos años que ha marcado a tantas personas de nuestro pueblo.

Además de preparar este monolito que tenemos aquí, del que os hablaré cuando lo destapemos, coincidiendo con la colocación del mismo hemos creído adecuado elaborar un recuerdo de este día, del 17 de junio de 2017. Para ello hemos editado este pequeño libro, que recoge tres relatos escritos por Javier Blasco durante los últimos años. Los tres fueron premiados en distintas ediciones de los concursos literarios convocados por el Ayuntamiento de Pina de Ebro anualmente. Cuando termine el acto repartiremos ejemplares para que los leáis y los guardéis como recuerdo.

Este libro no pretende ser nada más que un testimonio de lo que nuestro homenajeado, quien desde hoy dará nombre al parque de Pina, es capaz de escribir. Un testimonio de su sensibilidad, de su humor somarda -como buen aragonés-, de su capacidad de observación y de su conocimiento de flora y fauna, incluyendo la humana.

Y, por supuesto, este libro es un nuevo ejemplo del valioso patrimonio humano que tiene nuestro pueblo. No lo olvidemos nunca".

Por cierto, el libro del que hablo en el texto se puede conseguir en las oficinas del Ayuntamiento de Pina.

Ayer martes fue un día con muchos temas: el proceso de selección de personal del plan de empleo de DPZ, las piscinas, la Comisión de Agricultura, la reunión de la Comunidad de regantes de La Atalaya... Y hoy lleva camino de ser igual de intenso. Ya hemos empezado el día con las piscinas y ahora voy camino de Zaragoza a una reunión con el gerente del IASS (Instituto Aragonés de Servicios Sociales), Joaquín Santos, para hablar de uno de los temas por los que más me pregunta la gente: la residencia de la tercera edad. 

Y para terminar la tarde, Marisancho Menjón, Santiago Cabello y Ramón Salanova vienen a Pina a presentar la guía turística y el proyecto de fotografías de 360 grados, que han realizado desde la delegación de Turismo de DPZ, cuyo diputado delegado es mi compañero y amigo Bizén Fuster. A las 8 en la Multiusos. Os llevaréis la guía a casa, además de conocer cosas de muchos pueblos de nuestro alrededor.

De Pina a Villamayor pasando por Leciñena

De Pina a Villamayor pasando por Leciñena

Día intenso y viajero. Tras una mañana casi monográfica sobre agricultura y el PEBEA de "La Atalaya", para el que mañana hay una asamblea en la Sala Multiusos a las 18,30h., ha tocado tarde monegrina en Leciñena. Allí hemos escuchado lo que se ha hecho desde que aparecieron los primeros ataques de lo que parecían perros asilvestrados y ha acabado siendo un lobo. La convivencia entre los rebaños de ovejas y el lobo es imposible si no se toman medidas. Esperemos que la DGA ponga en marcha mecanismos compensatorios para quienes han perdido ganado y probablemente tengan que invertir en seguridad para sus animales. Pasa lo mismo con las pérdidas de ganado y gastos sanitarios que genera la mosca negra, una plaga contra la que estamos intentando encontrar soluciones, pero que no pueden encontrarse actuando sólo en un municipio. Habrá que coordinarse. Y ahora, en Villamayor de Gállego, donde nos van a presentar la guía turística de DPZ que conoceréis el miércoles en Pina.

Entrevista en Heraldo de Aragón

Entrevista en Heraldo de Aragón

Carta al Ministro de Fomento

Carta al Ministro de Fomento

Pina de Ebro, 26 de noviembre de 2016

A la atención de:

Don Íñigo de la Serna

Ministro de Fomento

Gobierno de España


Excelentísimo Señor Ministro.

En primer lugar debo felicitarle por el cargo que acaba de estrenar y desearle que pueda llevar adelante tantos proyectos como los que necesitamos en Aragón.

Le escribo esta carta como alcaldesa de un municipio de poco más de 2.500 habitantes, a 40 km. de la ciudad de Zaragoza, Pina de Ebro. En mis 43 años de vida mucha gente de mi pueblo o de los alrededores ha muerto o ha sufrido las consecuencias de accidentes en las dos carreteras del Estado que rodean Pina: la N-232 y la N-II.

Hoy le escribo a causa de la primera, la N-232, sobre todo a causa de los lamentables acontecimientos que hemos vivido en ella los últimos días, en su tramo entre El Burgo de Ebro-Alcañiz. Desde el pasado 10 de noviembre hasta esta misma mañana hemos sufrido en este tramo, de apenas 90 kilómetros, cinco accidentes con 2 víctimas mortales y 15 personas heridas de distinta consideración. Entre 2001 y 2013, en el tramo aragonés de la N-232, desde El Burgo de Ebro hasta Las Ventas de Valdealgorfa, se ha producido de media un accidente cada nueve días: 480 accidentes, que han dejado 41 víctimas mortales y 837 personas heridas.

Por ello, y para evitar seguir aumentando esta sangría, desde que en el año 2003 entré como concejala en el Ayuntamiento de Pina de Ebro, han sido múltiples las ocasiones en las que he solicitado al Gobierno de España el desdoblamiento de esta carretera. De hecho, todos los ayuntamientos y, en general, toda la ciudadanía de las zonas afectadas, así como otras instituciones comarcales, provinciales, Gobierno de Aragón o Cortes de Aragón, reivindicamos desde hace décadas, unánimemente, este desdoblamiento, como puede comprobar en los archivos del Ministerio que usted dirije.

Es una de las carreteras más peligrosas de Aragón y no tiene ni autovía ni autopista paralela, por lo que no tenemos alternativa a la hora de ir al centro médico, al instituto de educación secundaria, a trabajar... Cientos y cientos de personas salen a esta carretera todos los días arriesgando sus vidas, pensando "¿cuándo va a tocarme a mí?". Cientos de familias, como las que estaban anoche conmigo cuando nos enteramos del accidente que acababa de producirse en El Burgo de Ebro, corren a llamar a sus hijos e hijas en cuanto se enteran de un accidente, para confirmar que todavía siguen vivos.

Por todo ello, porque usted ha sido alcalde y no me cabe duda de que habrá vivido momentos de sufrimiento al ponerse en la piel de sus vecinos y vecinas, y por lo tanto entenderá mi reivindicación de mayor seguridad para la gente de nuestros pueblos, le invito a recorrer conmigo tanto el tramo de la carretera N-232 entre El Burgo y Alcañiz como el tramo de la N-II entre Alfajarín y Pina, en el que es urgente la liberalización completa del peaje tras el descarte definitivo, hace unos años, de las obras de desdoblamiento.

Esperando su respuesta, reciba un cordial saludo. 

Marisa Fanlo Mermejo

Alcaldesa de Pina de Ebro

Volví a nacer

Como todos los 24 de septiembre desde hace seis años, me levanto con Los enemigos tarareando "he vuelto a nacer".

Todavía recuerdo aquella semana como si fuera ayer. Comenzaba a la espera de que nos dejara José Antonio Labordeta, y nos dejó. Aunque ya era domingo, yo estaba en el sábado todavía cuando me avisaron.

Los dos días siguientes fueron emocionantes, sorprendentes, tristes, llenos de algo que podría ser orgullo por haber compartido con ese hombre algunos momentos y muchas inquietudes. En resumen, un privilegio para mí por poder estar presente en la Aljafería, en primera fila, durante unos momentos históricos, acompañando a una familia a la que nada podía quitarle el dolor, ni las miles de personas que pasaron por allí ni nuestra compañía. 

La visita a la tumba de Joaquín Costa para llevar las flores que tanta gente había traído o mandado a la Aljafería fue también muy simbólica para mí. Decía mucho de esas personas que tienen claro de dónde vienen y adónde van. Y Labordeta y su familia tenían clara esa herencia y esa deuda. Porque al final Aragón siempre será de quienes lo defiendan y de quienes luchen por él. Y esos días Aragón era suyo.

Y continuamos trabajando aquella semana. Y llegó el viernes 24. Y tuve que irme a Fraga, en representación de CHA, a sustituir a Bizén Fuster en una reunión por el desdoblamiento de la N-II, con Salvador Ariste y representantes de otros partidos, junto a alcaldes y alcaldesas de los municipios afectados.

Y es lo que tiene la N-II. Una tarde después de comer, el sol en los ojos, a 80 por hora detrás de camiones, rodeada de ellos por todos los lados y se te cierran los ojos.

Y algunas veces, no muchas, vuelves a nacer.

(Publicado en arainfo.org el 24 de septiembre de 2016)



Un pleito de 1743 del conde de Sástago contra la villa de Pina

Un pleito de 1743 del conde de Sástago contra la villa de Pina

Buscando otra cosa, me encontré el otro día este trabajo que hice cuando estudiaba. Aquí os lo dejo. 

INTRODUCCIÓN

Para conocer la situación de la aristocracia aragonesa a lo largo del tiempo o en un momento concreto, una de las fuentes históricas que pueden estudiarse son los pleitos que sostenía la nobleza, sobre todo con los súbditos de sus propias tierras. Por eso, un pleito que cubre el periodo de 1743 a 1765 es muy importante conocerlo ya que da información sobre los intereses o preocupaciones que en ese largo tiempo tenían esos nobles. 

Además, sabemos que en aquellos momentos la aristocracia estaba en decadencia y tenía muchos menos poderes que en otros tiempos anteriores en los que podía ejercer su autoridad de forma coactiva sobre sus súbditos por tener en sus manos el poder territorial, jurisdiccional y de nombramiento de cargos municipales. Esta situación ya ha cambiado en el siglo XVIII en muchos lugares. 

Concretamente en Pina, los condes nunca habían gozado de todos esos derechos a causa del origen de la cesión de la villa por Jaime I al señorío de Sástago como villa de realengo. Pero, a pesar de esto, Pina tenía que luchar en los tribunales para mantener esos privilegios y también intentaba evitar pagar al Conde de Sástago basándose en las leyes que emitían los organismos jurídicos estatales para acabar con los problemas de competencias, sobre todo en cuanto a cobros, entre el Estado y los señores.

Respecto al pleito que comentaré posteriormente, en su título aparece el motivo por el que se abre el expediente, "recobro de maravedíes", pero aclararé que el origen está en el impago, en 1742, de la pecha anual que le pagaban los vecinos de Pina al Conde de Sástago.

LA CASA DE SÁSTAGO

El título de conde es el grado más elevado de la alta nobleza del Antiguo Régimen y el Conde de Sástago, en concreto, está entre los Grandes de España de Primera Clase, lo que supone mayor antigüedad que los nobles de Segunda y Tercera, aunque el Rey podía otorgar grandeza a títulos recientes y, de hecho, lo hacía.

El señorío de Sástago se convirtió en Condado tras la venta, en 1511, de don Blasco de Alagón, 11º señor de Sástago y abuelo del primer conde, a su nieto con su mismo nombre, de todas las villas y lugares que formarán el núcleo originario del mayorazgo de primogenitura. Ese núcleo se encuentra en la Ribera del Ebro, zona de la que se conoce con detalle el régimen señorial allí impuesto. 

"Ahora bien, había señorío, pero no señores: muchos titulares tenían casas locales pero eran absentistas y tenían residencia principal en Zaragoza, y los más importantes residencia secundaria en Zaragoza y principal en Madrid"1. Casi todos los pueblos de los alrededores de la ciudad de Zaragoza estaban en manos de las mayores casas nobiliarias aragonesas y en ellos se daba dicha circunstacia.

Ya en 1533 se considera a la Casa de Sástago una de las ocho principales de Aragón. Pero por esas fechas muchas de las más importantes casas nobiliarias de otros reinos empezaban a generar censales y deuda y a fines de siglo la situación era ya exagerada, mientras en Aragón, según A. Abadía Irache, "el proceso de enajenación de rentas pudo intensificar su desarrollo desde la Baja Edad Media"2.

Este fue también uno de los problemas de los condes de Sástago y al adeudamiento general de la nobleza contribuyó decisivamente el aumento de los lujos y de los gastos por cargos políticos. En Zaragoza muchos nobles se construyeron palacios, como el de los condes de Sástago en el Coso, comenzado hacia 1565, por ser esta ciudad un lugar muy importante desde el punto de vista comercial, cultural y político.

Por esas razones los nobles no sólo tuvieron problemas con los censales, sino también con el dinero líquido para pagos corrientes, por lo que constantemente tuvieron que pedir adelantos a los arrendatariosde sus rentas. Esto sucedía también por la imposibilidad de los nobles de vender parte de su patrimonio por ser propiedad vinculada, como recuerda Pérez Sarrión, quien afirma que esos censales se convirtieron en deuda fija "cuyos intereses superaban toda capacidad de pago"3. 

Esta situación, que también ha descrito L. Stone en La crisis de la aristocracia y que se puede encontrar en distintos países europeos, seguirá durante los siglos posteriores y llevará a la nobleza a situaciones al borde de la ruina. El mismo G. Pérez Sarrión dice: "hoy sabemos que en los siglos XVII y XVIII rentas tan importantes como las del condado de Sástago en realidad estuvieron constantemente en manos de los acreedores"4 y la causa, según muchos historiadores, es la mala administración, nada racional, de los titulares de los bienes, que, en muchas ocasiones, los dejaban en manos de arrendatarios.

Este estado ruinoso de la nobleza se vio agravado ppor los numerosos pleitos que tenían lugar, habitualmente, entre los señores y los concejos y vecinos de los lugares de su señorío y que manifestaban, sobre todo, resistencias crecientes al pago de rentas jurisdiccionales (como las pechas, causa del pleito que describiré posteriormente), a los monopolios o a los derechos de nombramiento de cargos. Además, otro tipo de pleito muy frecuente entre los nobles era el sucesorio, debido a la política matrimonial que unía a las distintas casas aragonesas.

Quizás el empeoramiento de la situación de la Casa de Sástago en el siglo XVIII se pueda relacionar con su apoyo al archiduque Carlos de Austria, en la Guerra de Sucesión española, que perdió, ya que Pérez Sarrión explica que, entre los nobles, "quienes apoyaron al archiduque Carlos sufrieron confiscaciones de bienesy fueron perseguidos"5.

Está claro que, en Pina, el conde de Sástago no tenía, en el siglo XVIII, todos los derechos territoriales, de nombramiento de cargos y jurisdiccionales, conservando apenas estos últimos, es decir, las pechas y alguno más. Esto sucedía también en otros lugares en los que la justicia la empezaban a administrar tribunales reales. Además, la villa de Pina tenía algunos privilegios desde que Jaime I se la permutó a los Alagones con condiciones de villa realenga. Como dice A. Abadía Irache, "los vasallos de Pina eran vasallos forales, no estaban sometidos a la absoluta potestad de los señores laicos de Aragón y tenían recurso a la Real Audiencia. A los habitantes de Pina se les reconocieron importantes prerrogativas en la designación de los oficios municipales y les pertenecía el aprovechamiento del llamado dominio inferior de la villa: aguas, leñas, cazas y, sobre todo, pastos". Estos últimos eran muchas veces arrendados a pastores trashumantes del Pirineo. "Los condes de Sástago eran señores paccionales de la villa de Pina y estaban obligados a jurarle sus privilegios cuando recibían el homenaje de sus vasallos en la toma de posesión del condado"6.

Ese homenaje y la jura de los privilegios de la villa fueron las causas de que don Gabriel Blasco se hallase enfrentado a los vecinos de Pina, produciéndose episodios de gran crispación en el ritual de toma de posesión del condado. Este conflicto sucedió en julio de 1596, cuando don Gabriel Blasco rehusó confirmar los privilegios de los habitantes de Pina antes de recibir el homenaje de la villa, por lo que los vecinos se molestaron, aunque al fin todo se solucionó de manera diferente según distintos testimonios: los vasallos y el protocolo del notario Juan Escartín dicen que el conde juró en la puerta de la Iglesia parroquial de Pina ante Nicolás de Broto, lugarteniente de justicia, y el notario local, pero los acompañantes del Conde afirman que se negó a jurar y hubo discusiones entre los vecinos hasta que se decidieron a rendirle el homenaje a pesar de todo.

Este forcejeo no será ocasional. Continuará habiendo disputas y pleitos y con el mismo Gabriel Blasco todavía habrá otro problema cuando en 1598 convoque un Concejo general en Pina, con finalidad económica, y dicte unos estatutos municipales por los que se quedaba con amplísimas competencias. Por supuesto, aprovechó para evitar posibles reacciones decretando las confiscaciones de bienes y el destierro de catorce vecinos "en virtud de la absoluta potestad que por fuero del presente Reino de Aragón le ha pertenecido como señor de dicha villa". Cuatro de los catorce desterrados se apellidaban Broto y uno de ellos de nombre Nicolás, como el que le tomó juramento al Conde en 1596. Al día siguiente del Concejo, desterró a dos más7.

A. Abadía Irache también afirma que "Pina de Ebro tardó muy poco en recuperar la iniciativa tras el embate de noviembre de 1598; al año siguiente demandó civilmente a su señor en la Corte del Justicia"8.

En pleitos como este y otros posteriores, como el de 1743 que comentaré más abajo, los condes gastaron enormes sumas de dinero que aumentaron mucho la deuda de la Casa. Por esta causa el sucesor de don Gabriel Blasco, don Lorenzo Artal, que encontró una muy mala situación económica en sus cuentas, no tuvo más remedio, como dice Abadía Irache, "que avenirse con su villa de Pina. Un arbitraje definió en 1608 de forma pormenorizada y rigurosa las relaciones de los condes de Sástago con sus privilegiados vasallos y dispuso severas sanciones económicas para evitar las transgresiones de los señores"9.

Otros sucesos afectarán por esas fechas al condado de Sástago, y en especial a su economía. El primero será la matanza de los moriscos de Pina por Lupercio Latrás y sus gentes en 1588 y el segundo, la expulsión general de los moriscos de 1610, muchos de los cuales habitaban en sus tierras y pagaban al conde de Sástago.

Así pues, podemos concluir afirmando que ese endeudamiento de las casas nobiliarias va creciendo en Aragón desde finales del siglo XV hasta que se produzca la crisis que tantos historiadores han tratado y que desembocará en la disolución de los mayorazgos y en la pérdida de poder de muchas de esas casas, sobre todo ya en el siglo XIX.

PLEITO CIVIL DEL CONDE DE SÁSTAGO CONTRA LA VILLA DE PINA SOBRE RECOBRO DE MARAVEDÍES

El Conde de Sástago de 1743 es Cristóbal Fernández de Córdoba, Alagón, Aragón, Bazán, Martínez de Luna, Conde de Sástago, Grande de España de Primera Clase domiciliado en Zaragoza. Él es quien inicia el pleito que constituye este expediente formado por distintos documentos de diferentes fechas.

El primer documento que aparece es un nombramiento de seis procuradores por parte del Conde para que actúen legalmente por él en sus territorios. En el texto se citan las múltiples operaciones que pueden realizar en nombre de este noble. Es un documento datado en Zaragoza el 12 de junio de 1738 y verificado posteriormente, en 1743, al empezar el pleito, por un notario de número de Zaragoza. Este texto acompaña a los posteriores para probar que es cierto que la persona que está actuando en nombre del Conde, Joseph Forcada, fue nombrada por aquél como su procurador en 1738, es decir, antes del pleito.

El siguiente documento está fechado en Pina el 17 de junio de 1743. Lo firma Gerardo Sotre, secretario del Ayuntamiento de esa villa, y certifica que estando reunido el Ayuntamiento apareció Joseph Riquelme, apoderado y administrador del Conde de Sástago, para reclamar el pago de la pecha correspondiente al año anterior, 1742. El Ayuntamiento de Pina de 1743, cuyo alcalde y síndico procurador general es Francisco de Broto, cuyo apellido coincide con el de personas destacadas en disputas frente a anteriores condes que hemos citado anteriormente, responde a Joseph Riquelme que no es a ellos a quienes les corresponde satisfacer esa deuda, sino al Ayuntamiento del año anterior, que era el encargado de cobrarla a los vecinos del pueblo.

Sigue una carta de petición de Joseph Forcada, supuestamente a la Real Audiencia de Zaragoza, que no es citada ni en la carta ni en la resolución posterior, en la que afirma que el Ayuntamiento de Pina debe todavía 45 libras y 18 sueldos jaqueses de las 97 libras y 10 sueldos jaqueses de pecha que debían haberse pagado en agosto de 1742 al Conde. Tras haber contestado al Ayuntamiento de 1743 lo dicho en el documento anterior, Joseph Forcada relata que él requirió a las personas que componían dicho Ayuntamiento en 1742 y éstas lo volvieron a enviar al nuevo Ayuntamiento. Así sucesivamente se iban excusando los ayuntamientos de 1742 y 1743, lo cual Joseph Forcada no considera justo, ni entiende si esto sucede porque los vecinos no quisieron pagar la pecha al Ayuntamiento o porque éste no se la quiere pagar al Conde. Por esto suplica a más altas instancias, se supone que a la Real Audiencia de Zaragoza, que ordenen pagar al Ayuntamiento de Pina tanto las 45 libras y 18 sueldos jaqueses correspondientes a la pecha, como los gastos generados por la demanda y la deuda generada por el Conde al no disponer de ese dinero. La resolución a esta petición es de 27 de junio de 1743 y da la razón al Conde, como ocurre en la mayoría de los pleitos entre los señores y sus súbditos, pero matiza que si el Ayuntamiento de 1742 había cobrado ya la pecha a los vecinos, es él quien debe pagar al Conde y se le debe apremiar para que lo haga, pero si no se ha cobrado deberá encargarse de hacerlo el Ayuntamiento de 1743.

A partir de aquí aparece otro pleito sin apenas relación con el de 1743 sobre la pecha de 1742: uno de 1760 causado porque el Ayuntamiento de Pina no quiere pagar la pecha y los cargos dominicales de ese año ateniéndose a la Real Orden del Consejo de Castilla de 22 de julio de 1760, por la que se prohibía el repartimiento del pago de la pecha, como se explica en los siguientes documentos que paso a describir.

En primer lugar, hay que tener en cuenta que en 1760 el Conde de Sástago no es el mismo que en 1743, por lo que el primer documento que parece en este segundo pleito es el nombramiento de los nuevos procuradores de Francisco Fernández de Córdoba, realizado en Zaragoza el 5 de octubre de 1757, aunque el documento es una copia de 1760.

El siguiente documento está datado en Pina el 8 de noviembre de 1760 y lo redacta el notario público Juan Costa. En él se relata que J. Riquelme acude al Ayuntamiento de Pina en nombre del Conde de Sástago para reclamar las 97 libras y 10 sueldos jaqueses de la pecha y los cargos dominicales de ese año que debían haber pagado el 15 de agosto. El Ayuntamiento le responde que, a causa de la Real Orden de 22 de julio ya citada, no puede pagar esa pecha por repartirse su pago entre los vecinos de la villa, ya que es eso precisamente lo que se prohíbe en ella. Este texto es enviado al Conde para que conozca la situación e interponga un recurso ante la justicia.

Será en la posterior petición, o recurso suplicatorio, de Joaquín Forcada, nuevo procurador del Conde, a la Real Audiencia donde se deje claro que el pleito de 1743 ya se había solucionado: "en veinte y seis (sic) de Junio del año mil setecientos quareinta y tres se pidió por el Padre de mi Parte que el Ayuuntam(iento) de (dicha) Villa le pagase quareinta y cinco libras diez sueldos, que en cada un año por el mes de Agosto devía darle cobradas de los vecinos de condicion; y el Ayuntam(iento) de aquel año se escusaba [...]; Y de conformidad puntualm(ente) han como siempre continuado en (dicho) pago". Por lo tanto, el pleito que aparece unido al de 1743 sólo tiene en común con él los protagonistas, el Conde y la villa de Pina, y el impuesto que se quiere evitar pagar.

Vemos pues que los Condes de Sástago no dejaron de tener pleitos con la villa de Pina a lo largo del tiempo, como les sucedió a muchas otras casas nobles que gastaron mucho dinero en pleitos como estos con sus propios vasallos.

Resumiendo, el posterior pleito de 1760 se soluciona también a favor del Conde de Sástago, ya que, como dice Joaquín Forcada en otro de los documentos, la Real Orden "prohíve a los Ayuntam(ientos) las Pechas, e Impuestos, que de su autoridad, y para sus fines particulares, se establecen; y no para liberarse de los Pagos, y Cargas,que deven al Dueño temporal". Ésta parecía ser la intención del Ayuntamiento de Pina que entendía que la Orden se debía aplicar a "todas quantas Pechas o repartimientos se estuvieren practicandoen los Pueblos de este Reyno sin la correspondiente facultad, y reconociendose (por dicho) Conde (que) las Cantidades (que) pide, proceden de Pecha y repar(timiento)", que es lo que prohíbe esa Orden, aunque al no aparecer transcrita la misma no sabemos quién la interpreta erróneamente. Aunque ya en 1760 y 1762 hubo resoluciones de la Real Audiencia negando las razones que asistían al Ayuntamiento de Pina, tras un forcejeo que duró cinco años, y en el que llegó a intervenir el gobernador de Aragón, representante del Rey, por fin el 14 de diciembre de 1765 se supone que ese Ayuntamiento acepta su derrota, ya que en el pleito no aparecen documentos posteriores.

NOTAS 

PÉREZ SARRIÓN, G., Aragón en el Seiscientos: crecimiento económico, cambio social y cultura, 1700-1808, Milenio, Lleida, 1999, p. 291.

ABADÍA IRACHE, A., Señorío y crédito en Aragón en el siglo XVI, Institución Fernando el Católico, Zaragoza, 1993, p. 49.

3 PÉREZ SARRIÓN, G., op. cit., p. 269.

4 Ibídem, p. 269.

Ibídem, p. 270.

ABADÍA IRACHE, A., op. cit., p. 73.

Ibídem, p. 75.

Ibídem, p. 76.

Ibídem, p. 79.

Empiezan las fiestas de Pina pero ¿por qué se celebran ahora?

Empiezan las fiestas de Pina pero ¿por qué se celebran ahora?

Anoche, en mi discurso durante la presentación de las Majas 2016, expliqué un posible origen, basado en la carta de un cura natural de Pina, nacido en 1867, del inicio de la tradición de celebrar las fiestas de Pina para San Roque. Aquí va el discurso completo.

Vecinos y vecinas de Pina, amigos y amigas que venís de otros lugares a acompañarnos en nuestras fiestas, buenas noches y gracias por estar aquí acompañando a Irene, Marina y Ruth. 

Debo empezar agradeciendo su colaboración a todas las empresas, comercios, bares y personas particulares que contribuyen a mejorar nuestras fiestas año a año. Sin todos ellos, sin los presentadores, sin las Majas y sin la Comisión de Fiestas, todos estos actos no podrían realizarse como los conocéis. Para todos ellos me gustaría pedir un fuerte aplauso.

 Hoy quería contaros una historia que conocí hace pocos días gracias a José, el cura de Pina, y a Sandra, que me trajo una hoja parroquial al ayuntamiento anunciándome que me gustaría. Y como fue así, me gustó, quiero compartir un breve resumen con vosotros. 

José publicó una carta de un cura natural de Pina, mosen Pablo, nacido en 1867, en la que le explicaba quiénes eran los santos patronos de Pina al cura que había aquí en 1942. Y de San Roque decía lo siguiente: "De San Roque diré a usted que, aparte del arco y la imagen en él colocada, que era una cosa privada y de propiedad de la casa, aunque se exponía, como hoy se hace, y tal vez tuvo origen en la devoción de los primitivos dueños de dicha casa, durante mi niñez y mi juventud, no había en la iglesia parroquial más imagen de San Roque que la que se sacaba en procesión, y otra pequeña", que explica después que desapareció. 

Y sigue mosen Pablo en su carta:

"Tal vez la devoción a San Roque y su fiesta votiva date del que llamaban, cuando yo era chico, el primer cólera (se refiere al de 1834). El del año 85 que yo conocí y del que me acuerdo muy bien, pues tenía 17 años, hizo que la gente acudiera a San Roque, cuya imagen, la de la procesión, estaba hecha un ascua de luces, y se notó la particularidad de que en la Calle Mayor (hoy Jaime Casasús) en todo el trayecto que abarca la vista desde el balcón del arco de su nombre, no se registrase ningún caso, y por esta razón cuando esta cesó (se refiere a la epidemia) se celebró una corrida de vaquillas en ese trecho de calle". 

Igual que entonces celebraron que no se registrasen casos de cólera en aquel tramo de calle, hoy podemos celebrar que no tenemos que lamentar ninguna pérdida personal en los últimos accidentes de tráfico en los que hemos visto implicada a gente joven de nuestro pueblo. 

Tengo que citar a Ángela Labadía, a la que tanta ilusión le hacía estar hoy aquí, a pesar de que le daba mucha pena dejar de ser Maja, como nos contaba hace unos días. Ella está bien y mañana la veremos por Pina, seguro, pero ha tenido que quedarse en observación. Vamos a mandarle nuestro ánimo desde aquí con un aplauso. 

Y termino confesándoos una cosa. Hay veces en las que me siento muy orgullosa de la gente de Pina y hoy he tenido dos ocasiones para ello. Unos padres destrozados, que no eran de aquí, me decían esta mañana que la gente de Pina es estupenda y me daban la enhorabuena porque les habían tratado muy bien en unos momentos muy duros para ellos. Otro padre, Arturo Carranza, me ha preguntado hoy que si me parecía bien trasladar esta noche, en su nombre, su agradecimiento a toda la gente que se ha preocupado por su hijo tras el accidente que sufrió hace unas semanas. Podemos estar contentos porque evoluciona muy bien y ya está en Pina desde hace unos días. 

Así que en su nombre y en el mío quiero acabar dandoos a todos y a todas vosotras la enhorabuena porque siempre sabéis estar donde se os necesita. 

Por eso, vamos a celebrar durante unos días que estamos vivos y la semana que viene ya volveremos a hablar de caminos, de averías de agua, de motas sin arreglar, de calles sucias y de lo que queráis, y, por supuesto, tened mucho cuidado con los coches. Queremos veros a todos y cada uno enteros la semana que viene. 

¡Disfrutad mucho y felices fiestas! ¡Viva San Roque y viva Pina!

Rueda: el principio del fin de un despropósito

Últimamente, pensar en el monasterio de Rueda significa para quienes conocemos y queremos ese lugar, sentir rabia. Rabia y desazón.

Hace pocos días, justo antes de saltar la noticia de que la UTE Manzana Hospederías no iba a volver a abrir esas instalaciones, que nunca ha abierto en condiciones, tuve la ocasión de hablar con el director gerente de Turismo de Aragón, Jorge Marqueta.

Cuando, unos días después, salió la empresa diciendo que no iba a abrir la hospedería porque el Gobierno de Aragón ha estado incumpliendo el contrato, me quedé atónita.

Como la Asociación de Amigos del Monasterio de Rueda ha analizado detalladamente e informado al propio Gobierno de Aragón, la concesionaria lleva prácticamente desde que firmó el contrato, en agosto de 2014, sin cumplirlo.

La Asociación ha destacado en numerosas ocasiones la falta de mantenimiento de infraestructuras como la noria que da nombre al conjunto, la falta de limpieza en el recinto, los problemas para alojarse o simplemente para hacer uso del comedor de la Hospedería por los continuos cierres y la apertura mínima del establecimiento, el impago a quienes allí han trabajado y a quienes han sido sus proveedores, etc.

Por esas razones, me parece indecente que cuando se ve pillada por todos sus incumplimientos, la UTE acuse al Gobierno de Aragón de haber incumplido el contrato (por cierto, sin especificar ni uno solo de esos incumplimientos).

Si no fuera porque todas las personas que hemos visitado el monasterio de Rueda los dos últimos años, hemos visto su progresivo y cada vez más evidente abandono, sería su palabra contra la del Gobierno. Las quejas y denuncias de particulares no han faltado durante este tiempo y en los últimos meses los gestores de Manzana Hospederías, está claro, que han visto las orejas al lobo. Al verse amenazados porque el Gobierno de Aragón está estudiando esa situación de abandono y su responsabilidad e incumplimientos respecto al contrato firmado, la UTE nos sale con éstas y cierra.

No sé si es políticamente correcto que diga esto, pero yo creo que el cierre unilateral por parte de la empresa es lo mejor que puede pasar para el futuro del monasterio de Rueda. Otro incumplimiento más e incluso anunciado en prensa.

Lo que sí sé es que, en ocho meses que lleva en su cargo, el director gerente de Turismo de Aragón ha constatado por activa y por pasiva no sólo la dejadez del último año, sino también esas otras obligaciones que nunca han cumplido. De hecho, ya el año pasado, el 20 de marzo de 2015, los anteriores responsables de Turismo de Aragón denunciaban la suspensión unilateral, por parte de la empresa, de la actividad de visitas guiadas, cuestión ajena al cierre cautelar de la Hospedería, que se llevó a cabo basándose en las actas de inspectores del entonces Departamento de Sanidad, Bienestar Social y Familia del Gobierno de Aragón, por la falta de condiciones higiénicas de las instalaciones e infraestructuras de captación y depósito de agua, la inadecuación de los tratamientos de depuración y la falta de control y análisis de la calidad del agua. A ello hay que añadir el incumplimiento de los requerimientos de Turismo de Aragón derivados del defectuoso mantenimiento de la planta potabilizadora.

El listado de peticiones de información a la empresa es largo. ¿Cuál es el problema pues? ¿Por qué no se echa a la empresa y se contrata a otra? ¿Por qué no va el Gobierno de Aragón y entra y arregla el monasterio? Cualquier persona que haya trabajado o conozca las leyes que rigen la contratación en el sector público puede deducir las dificultades que conlleva la resolución de un contrato, sobre todo si una de las partes no está interesada en terminarlo. Y ahí está el problema. Hay una parte que va a usar cualquier argumento, sea cierto o no, para sacar tajada de un contrato que nunca ha cumplido. Y, por lo tanto, el Gobierno de Aragón debe ser totalmente escrupuloso en la tramitación y en el proceso que lleva entre manos. Porque hay un contrato todavía en vigor. Si yo alquilo un piso, no puedo entrar cuando me dé la gana allí por mucho que sea mío. Pues lo mismo: hay que recabar información para poder rescindir el contrato sin indemnizaciones.

Espero que si la UTE se atreve a llevar a juicio al Gobierno de Aragón, la justicia tenga en cuenta esos detalles que todos hemos visto, así como el corte de luz por impago, desde diciembre de 2015, que ocasionó que Turismo de Aragón les advirtiera que el cierre del establecimiento constituía “un incumplimiento de las obligaciones esenciales del contrato" y calificara la situación como grave, exigiéndoles que subsanaran las deficiencias antes del 31 de diciembre. Y de entonces a ahora, cada vez peor.

La UTE estaba avisada de lo que podía pasar. Y ahora buscan excusas. Y por eso acusan a quien les acusa, a quien ha levantado acta ante una notaria para dejar constancia de los incumplimientos, a quien está realizando todos los trámites necesarios para que el dinero público no acabe en los bolsillos de quien no ha cumplido un contrato. Pero no nos van a engañar, porque llevamos mucho tiempo conociendo a esa manzana podrida. 

(Artículo publicado en AraInfo el 25 de julio de 2016))

Reírse de nosotras

Reírse de nosotras

Esta campaña electoral es la primera en la que no me veo inmersa, bien directamente como candidata o bien como responsable de CHA, desde el año 2003. Doce procesos electorales municipales, autonómicos, estatales y europeos en trece años.

Es evidente que me tengo que sentir rara estos días. Pero no sé si me falta algo o agradezco no estar metida en el fango.

Hay días, como el del debate estatal entre los cuatro principales candidatos a la presidencia de España, ese triste y aburrido debate, que agradezco no tener la “obligación” de verlo entero.

Hay otros días que escucho y me enciendo, como alcaldesa de un municipio que vive condicionado por este gobierno en funciones que podemos describir como lento, si soy generosa, o inoperante siendo realista. Porque está claro que de un año a esta parte, desde que fui elegida alcaldesa, ha cambiado mi perspectiva. O se ha ampliado.

Por eso tengo claro que quiero que cambie el gobierno que hay.

Porque no es bueno para nadie un gobierno que va a conceder ayudas para arreglar daños de la riada de 2015 un año y medio después, si hay suerte. Cuando se puedan utilizar esas infraestructuras habrán pasado ¡dos años!, por culpa de las dificultades que pone la convocatoria.

No se puede admitir que la gente de Pina siga teniendo riegos y caminos dañados cuando vaya a cumplirse año y medio de la riada. No se puede. Sobre todo, porque ese mismo gobierno nos impide a los ayuntamientos solucionar esos problemas por nuestra cuenta antes.

Por eso, por este asunto y otros muchos relacionados con sus políticas de desprecio hacia lo público, como alcaldesa, como persona, como mujer, quiero un cambio de gobierno.

¿Cuál es mi problema? No me fío de quienes pueden llevar a cabo ese cambio. Y tengo motivos de sobra para desconfiar de todos y cada uno de esos partidos.

Que algunos de ellos dediquen 9 o 13 segundos, en un debate entre quienes quieren gobernar España, a despacharse la vida de millares de personas (mujeres, pero también sus hijos e hijas) que han sufrido y sufren directamente el terrorismo machista no tiene nombre, pero qué indecencia que otros dediquen cero segundos cuando se han llenado la boca con terrorismos que han matado a muchas menos personas ¿No es eso crear víctimas de primera y de tercera? Sólo puedo sentir desprecio y rabia hacia quienes las diferencian, hacia quienes deberían protegerles desde su labor pública.

Y para terminar, hablemos de Aragón. No he visto etiqueta o lema más confuso que #AragónSiempre del PP-PAR. Supongo que se refiere a un Aragón siempre despreciado por ellos, un Aragón siempre olvidado en su labor pública, un Aragón sin las autovías, desdoblamientos o ferrocarriles que han prometido mil veces, un Aragón ninguneado desde el origen de lo que llaman democracia y no lo acaba de ser…

A día de hoy, cuando queda una semana de campaña electoral, sólo puedo decir que todavía no sé si votaré el próximo día 26.

Lo único que sí tengo claro es a quienes no voy a votar el 26J. Paradójicamente, teniendo en cuenta que lo escribe una nacionalista aragonesa, no votaré -como alcaldesa, como persona, como mujer- a los únicos que nombran a Aragón en sus lemas. Reírse de nosotras no debería ser premiado aquí.

 

(Artículo publicado en AraInfo el pasado 19 de junio)

VI Jornadas de Creación Literaria en Aragón de Pina: literatura y cine

Siguiendo con el repaso, el año 2009, la sexta edición de las Jornadas estuvo dedicada a la relación entre la literatura y el cine. Participó Oscar Sipán, escritor con debilidad por el relato corto por su intensidad y su perfección que ha escrito, entre otras muchas obras, Pólvora mojadaLeyendario: monstruos de aguaEscupir sobre París Avisos de derrota. También, Emilio Ruiz Barrachina, licenciado en Ciencias de la Información y escritor, que ha pasado diez años en Latinoamérica como periodista, como conferenciante en las principales universidades colombianas y latinoamericanas y como columnista y analista internacional de Diario 16; además ha escrito novelas como CalamaríA la sombra de los Sueños La venta del Paraíso y ha dirigido varios documentales como El TranscantábricoLe ordeno que usted me quiera El enigma del Grial. La última participante fue Carmen Puyó, licenciada en Periodismo y en Ciencias de la Imagen-Cinematográfica por la Universidad Complutense de Madrid, que realiza la crítica de cine del Heraldo de Aragón desde los años 80.

El programa de las jornadas fue el siguiente:

Lunes 20 de abril. 
19h. Inauguración en la Sala Multiusos de las 6ª Jornadas literarias Cine y Literatura con la apertura de la exposición Programas de mano de películas, colección cedida por Juan de Haro Martínez (dicha exposición permanecerá abierta de lunes a miércoles de 19 a 21 horas). A continuación, charla-coloquio Literatura y cine por el escritor Oscar Sipán.

Martes 21 de abril. 
19h. Emilio Ruiz Barrachina nos hablará en su charla Cine y Literatura: Una idea, dos lenguajes de su experiencia como escritor, director y guionista de cine. A continuación se proyectará su documental Lorca, el mar deja de moverse, en la Sala Multiusos.

Miércoles 22 de abril. 19 h. Cine forum con la película Valentina, dirigido por Carme Puyó en la Sala Multiusos.

Jueves 23 de abril.
Festividad de San Jorge, Día del libro. Todos los actos de este día se realizarán en la Plaza de España:
17 h. Exposición de libros de la Biblioteca Municipal.
18h. Actuación del Teatro Arbolé con la obra Los títeres de Cachiporra.
20 h. Actuación del grupo musical Los anónimos.

2008: V Jornadas sobre creación literaria en Aragón

2008: V Jornadas sobre creación literaria en Aragón

Comencé el repaso a todas las jornadas literarias de Pina hace un tiempo, cuando se cumplía el décimo aniversario. Y lo continúo ahora allí donde me quedé, cuando ya han pasado incluso las décimoprimeras y estamos preparando ya las del año que viene.

Para ilustrar este comentario, he cogido la imagen de las jornadas del blog La cueva de Charles, de Carlos Carranza Comercio, pinero, filólogo y crítico literario en su canal de youtube con el mismo nombre que su blog.

Así explicaban en Europa Press el contenido de las V Jornadas de Creación Literaria en Aragón de Pina:

La localidad zaragozana de Pina de Ebro celebrará el día 20 de abril y hasta el mes de mayo las quintas Jornadas de Creación Literaria en las que participarán distintos autores. El teniente de alcalde y concejal de Cultura del Ayuntamiento de Pina de Ebro, Emilio Pardo, explicó a Europa Press que las Jornadas de Creación Literaria "han sido siempre muy exitosas".

PINA (ZARAGOZA), 3 (EUROPA PRESS)

La localidad zaragozana de Pina de Ebro celebrará el día 20 de abril y hasta el mes de mayo las quintas Jornadas de Creación Literaria en las que participarán distintos autores. El teniente de alcalde y concejal de Cultura del Ayuntamiento de Pina de Ebro, Emilio Pardo, explicó a Europa Press que las Jornadas de Creación Literaria "han sido siempre muy exitosas".

Este año, como principal novedad, "haremos un festival del agua, que será un recital de poesía cantada por el Grupo Monte Solo con el que se inaugurarán las jornadas el domingo 20 de abril". Esta iniciativa se lleva a cabo, además, coincidiendo con la celebración en verano de la Exposición Internacional de Zaragoza, cuyo lema es ’Agua y desarrollo sostenible’.

Además, para esta edición "se ha aumentado bastante el presupuesto", indicó el concejal, aunque no supo concretar la cifra presupuestaria. El consistorio dedica más fondos a estas jornadas porque "tienen mucho interés, y la gente las espera con ganas".

Las siguientes actividades, que se celebrarán en la sala multiusos de Pina, contarán con la presencia de destacados autores del panorama nacional. Así, el día 21, se contará con la presencia de Francisco Javier Aguirre, "para hablar de las publicaciones recientes que tratan Los Sitios de Zaragoza". El día 22 será el turno del escritor Juan Bolea, quien analizará la situación de la novela policíaca y su futuro.

El día 23 (festividad de San Jorge y Día del Libro) "se sacarán los libros a la calle, habrá animación cultural, y rendiremos homenaje a Eugenio Antonio Flores, una de las personalidades de esta villa". Flores, natural de Madrid e hijo adoptivo de Pina, "era un escritor y periodista del siglo XIX", apuntó Emilio Pardo.

Un día después, los vecinos de Pina tendrán una cita con la escritora Ángeles Irisarri, que presentará en la localidad su última novela ’La artillera’, centrada en la figura de Agustina de Aragón y otras nueve mujeres más, seis de ellas personajes históricos reales.

Además, el día 6 de mayo la alcaldesa de Pina, María Teresa Martínez, presentará el libro ’Solfea mis curvas’, de María José Castejón; y en el mes de mayo, los centros de educación de adultos de la zona organizarán un encuentro con José María Merino.

UN PUEBLO MUY LECTOR.

El interés del Ayuntamiento por acercar la cultura a sus vecinos es "total", aseguró el concejal, en gran medida porque "éste es un pueblo muy lector". Por este motivo, el Consistorio, la Biblioteca Municipal y el centro de Educación de Adultos aúnan esfuerzos para organizar actividades de este tipo.

Según datos facilitados por la biblioteca municipal de Pina a Europa Press, este centro cuenta con más de 15.864 libros y folletos, así como con más de 1.300 materiales sonoros y audiovisuales. En ella, había, en 2007, 515 socios adultos y 270 infantiles.

Por otra parte, una de las organizadoras de las jornadas, Victoria Zumeta, del centro de Educación de Adultos, explicó que "en Pina la animación a la lectura y la creación literaria son actividades que han cogido bastante auge".

En anteriores ocasiones en estas jornadas, que comenzaron en su día con la celebración de un taller de creación, han participado escritores como Magdalena Lasala, Óscar Sipán o José Luis Corral.

Nadie ha acabado con ella

Nadie ha acabado con ella

(Texto mío e ilustraciones de Sabina Blasco Zumeta)

Cuando mi bisabuelo, Emilio Pina, nació en Escatrón en marzo de 1873, ya llevaban lustros planeando –y escribiendo en leyes- unir el Bajo Aragón con el mar con una línea de tren.

Una de las últimas ideas, una década antes del nacimiento de mi bisabuelo, había sido que el tren saliera de Escatrón, de su pueblo, aunque él nunca lo supo, ya que ese proyecto, como tantos otros, se desechó enseguida.

Mi bisabuelo se llamaba Emilio por culpa de la fecha de su nacimiento. Resulta que mi tatarabuelo Bernabé, republicano admirador de Castelar, le quiso poner su nombre para celebrar la proclamación de la primera república, acontecida unas semanas antes, el 11 de febrero de 1873.

La célebre intervención de Castelar sobre la muerte de la monarquía fue pasando, con algunas variaciones, de generación en generación de la familia Pina. Hasta hoy. Decía algo así como: “con Fernando VII murió la monarquía tradicional; con la fuga de Isabel II, la monarquía parlamentaria; con la renuncia de don Amadeo de Saboya, la monarquía democrática; nadie ha acabado con ella, ha muerto por sí misma; nadie trae la República, la traen todas las circunstancias, la trae una conjuración de la sociedad, de la naturaleza y de la Historia”.

A los pocos días de nacer yo, mi abuelo Joaquín, que había nacido en 1912 y ya llevaba vividos más de 30 años de dictadura de Franco, me recitó esas palabras como si fueran una nana. Las llevaba grabadas a fuego en su cabeza y en su corazón, como si de una herencia familiar se tratara, y me las repetía en cuanto le dejaban cogerme en brazos. O eso me han contado siempre.

Él fue quien me enseñó, siendo yo todavía una niña, que los nombres de las cosas y de las personas tienen su razón de ser. Para que lo entendiera me ponía el ejemplo del bisabuelo Emilio, que siguió la tradición de su padre y reflejó su ideología y sus personajes admirados en el nombre de todos sus hijos: Carlos, por Karl Marx; Mateo, por Mateo Morral, y Joaquín, por Joaquín Costa. Yo no sabía quiénes eran esos hombres ni por qué mi madre le miraba mal al abuelo cuando me hablaba de ellos. Pero las miradas eran peores cuando el yayo me contaba que incluso a sus hermanas, mayores que él, el bisabuelo Emilio no quiso ponerles nombres de santas ni relacionados con la religión católica. Se llamaron Aurora y Rosa. Y no es que a mi madre no le gustaran esos nombres, pero es que la religión la llevaba metida en vena y no había quien se la tocara…

Aquella gran familia la formó mi bisabuelo Emilio en La Puebla de Híjar. En su juventud aún se había ganado la vida en Escatrón, ya que, entonces, había barcos que iban desde allí hasta el mar por el Ebro y alguien tenía que cargarlos. Pero otras veces iba a trabajar fuera de su pueblo, como cuando construyeron la vía del tren de la Val de Zafán entre La Puebla de Híjar y Alcañiz, a cuya inauguración asistió en 1895. Fue por entonces, cuando ya se terminaban aquellas obras, cuando conoció a mi bisabuela Flora y decidió que, con ese nombre, no se le podía escapar. O eso me contó mi abuelo Joaquín. Yo quiero creer que había más razones, además del nombre, para que tomara la decisión…

Desde entonces hasta que terminó la guerra civil, y se trasladaron a Zaragoza, vivieron en La Puebla de Híjar y allí nació mi abuelo Joaquín y toda la caterva de hermanos y hermanas, en total nueve, aunque cuatro de ellos no pasaron de la primera semana de vida.

Mi padre siempre me había hablado de su bisabuelo Bernabé y de mi bisabuelo Emilio, pero esas historias tenían una fecha tope y un pueblo que, no se sabía por qué, había dejado de existir para mi familia: 1936, Escatrón.

Desde que yo tenía uso de razón, mi padre jamás había visitado el pueblo de su familia ni había mostrado ningún interés en ir. Ni siquiera me había contado si existía todavía en Escatrón la casa del tatarabuelo Bernabé, aquel herrero republicano, que leía la prensa y conocía a todos los políticos de la época. En cambio, a La Puebla de Híjar íbamos a menudo. Sobre todo, a la estación y a caminar entre las antiguas vías del tren y entorno al puente de la Torica.

Hasta aquel día en el que decidió llevarme a Escatrón.

De los viajes nos quedan imágenes y palabras. Imágenes que nos recuerdan momentos, historias… Palabras que son como un río. Momentos que son como el agua que pasa, en la que te bañas, la disfrutas y se va. Historia que es pasado, presente y, quizás, futuro. Mis viajes son muchas cosas… Pero este viaje prometía ser algo más.

Era una tarde de viernes que apetecía disfrutar. Mi padre comenzó a hablar mientras un cielo azul con algunas nubes me obligaba a fotografiarlo con mi cámara desechable. Recorríamos los meandros del Ebro con las ventanillas bajadas, por una carretera estrecha por la que entramos hacia Cinco Olivas, Alforque y Alborge.

Mi padre me iba contando que parte de la familia Pina todavía vivía en uno de estos pueblos: en Alborge, los descendientes de uno de los hermanos del tatarabuelo Bernabé.

Y así comenzó a recordar cuando mi tatarabuelo y sus hermanos asistieron -él no recuerda la fecha, pero yo ahora la sé- el 23 de octubre de 1882, a la colocación de la primera piedra de la vía de Val de Zafán hacia Tortosa por parte del rey Alfonso XII.

Los republicanos del Bajo Aragón, entre los que no faltaba la familia Pina, no podían dejar pasar la ocasión. Esperaron al monarca en La Puebla de Híjar y, en cuanto vieron aparecer a la comitiva real, comenzaron a cantar una jota: “Que no se crea la gente/ Que la fiera no murió/ Que el Alfonso ya se va/ hasta cerca de la mar/ porque la fiera no ha muerto/ y si muere resucita/ Que no se crea la gente”. No hay noticias sobre si el Alfonso la oyó ni si, en su caso, la entendió. Pero consiguieron no ser detenidos por la Guardia Civil.

El día anterior, el 22 de octubre de 1882, Alfonso XII acababa de inaugurar también las obras del Canfranc, cuya línea llegaría a Jaca once años después, dos antes de que la línea de la Val de Zafán llegase de La Puebla de Híjar a Alcañiz.

Fue a partir de entonces cuando La Puebla de Híjar se convirtió en uno de los pueblos más prósperos del Bajo Aragón de finales del siglo XIX, gracias al tráfico ferroviario y la industria. Y fue por esas fechas cuando comenzó la relación de mi bisabuelo Emilio y sus descendientes con el mundo ferroviario y sindical.

Mientras cruzaba con mi padre el puente de Sástago, recordábamos a mi abuelo Joaquín, que fue quien más me enseñó de trenes y, sobre todo, del de la Val de Zafán. Tanto él como mi padre conocían perfectamente todo el trazado, los túneles, los valles, las estaciones… Mi bisabuelo Emilio lo había construido y se lo había enseñado después, al igual que ellos durante años, hasta la muerte de mi abuelo, habían intentado hacer conmigo. Mi bisabuelo vio nacer esa línea y mi padre la vio morir. El último día que vio el tren funcionando, el 19 de septiembre de 1973, fue el día que yo nací, el día del hundimiento del túnel que llevó al cierre de la línea. Mi madre me contaba que mi padre y mi abuelo lloraban aquel día y ella no sabía si era de pena o de alegría.

Dejábamos a la izquierda el camino que lleva al Monasterio de Rueda, para cruzar el río y entrar en Escatrón, cuando mi padre comenzó a desenmarañar mis dudas acerca de aquel viaje. Había tenido noticias de unos primos de Francia, descendientes de uno de los hermanos del bisabuelo Emilio, de quienes yo apenas había tenido noticias en mis veinte años de vida. Los últimos de la familia que habían vivido en la casa de Escatrón, a la que nunca volvieron desde aquel día de 1938 en que salieron de su pueblo. Eran muy mayores y no tenían nietos a quienes dejársela.

Paramos en la plaza de la iglesia y nos encaminamos a la calle Mayor. Daba pena ver tantos caserones cerrados y abandonados. Rejas, rafes, puertas y ventanas, que habían vivido tiempos mejores, nos vigilaban hasta que llegamos a aquella casona. Mi padre se paró, sacó del bolsillo una llave antigua, grande, pesada, y abrió la puerta. Era la llave que le había dado el bisabuelo Emilio en su lecho de muerte y que el abuelo Joaquín le recordó hace sólo unos meses, en el suyo.

Ese día de 1994, heredé la casa y la herrería de mi tatarabuelo Bernabé, junto a la historia de una familia lejana masacrada en campos franceses y alemanes. En mi familia tenemos muchas tradiciones y, de momento, las seguimos cumpliendo.

Ahora, hemos vuelto a Escatrón y aquí crecen mis hijas, escuchando las historias de sus abuelos y jugando a los nombres. Por cierto, mi padre se llama Buenaventura y mi madre, Hortensia. Yo, Paloma, como quiso mi abuelo Joaquín.

Nota: La mayoría de los datos históricos sobre la línea de la Val de Zafán que aparecen en este texto han sido extraídos del libro de relatos “Tren de Val de Zafán”, publicado en 2011 por Gara d’Edizions, Colección ViceVersa, 5.

(Este texto y las ilustraciones de Sabina Blasco Zumeta se han publicado en el último número de Rolde, Revista de Cultura Aragonesa, nº 154-155, julio-diciembre 2015)

25N, Día Internacional por la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres

17 mujeres al día fueron víctimas de violencia en Aragón durante los tres primeros meses de este año. Unas 1.600 denuncias.

Lo doloroso es que de más de 1.200 denuncias de abril a junio, solo 15 las interpuso la propia víctima.

Sigue habiendo miles de mujeres en nuestro entorno que sufren agresiones en silencio. Hay que hablar y hay que denunciar. Y tenemos que ayudar tod@s, desde las administraciones públicas y en nuestro entorno. 

Y ojalá consigamos que este tema no lo olvidemos el resto del año, que sea una cuestión de estado. No podemos ver cómo asesinan a más de 50 mujeres al año sin inmutarnos y sin intentar cambiar la sociedad en la que vivimos.

#NiUnaMás #NiUnaMenos

#NiUnaMás #NiUnaMenos

6 mujeres asesinadas en 5 días. ¿Se puede llegar a más? ¿Puede soportar esta situación una sociedad que se supone educada y desarrollada? ¿Puede soportarla sin escandalizarse? ¿Sin ser portada de telediarios, periódicos y sin estar en todas las redes sociales de mujeres y de hombres?

Si esta sociedad puede soportar esta forma de terrorismo, yo no quiero formar parte de ella.

Tantas razones para avergonzarnos...

Delegaciones, fiestas y demás...

Hace ya más de un mes desde que tomé posesión como alcaldesa de Pina el pasado 13 de junio.

Desde el primer momento, intenté que quienes conforman el grupo del Partido Popular pudiesen tener delegaciones si lo querían así, igual que el resto de los concejales y concejalas de la corporación. Y por eso, ya el día 15, me vi con la cabeza de lista del PP para que me trasladase sus intereses en cuanto a las áreas o delegaciones que podían gestionar. Después de cinco días hablé con dos de los concejales del grupo, quienes me trasladaron su interés por llevar las áreas de Cultura, Agricultura, Acción Social y Fiestas, además de estar en la Junta de Gobierno.

Tras reunirme con militantes y simpatizantes de CHA y con el grupo municipal del PSOE, cuyos tres miembros fueron quienes, junto a los de CHA, me apoyaron para que yo fuese alcaldesa, le trasladé a la cabeza de lista del PP mi ofrecimiento de delegaciones: el Aula Municipal de Educación de Personas Adultas, la Escuela de Música, Turismo, Agricultura y Servicios Públicos (alumbrado, abastecimiento de agua...). Dos días después me confirmaron que no iban a llevar esas delegaciones, entre otras razones porque no contaba con ellos para estar en la Junta de Gobierno.

La decisión es totalmente respetable, como no puede ser de otra manera, y espero que desde la oposición nos traigan al pleno o a las comisiones todas las propuestas que crean que pueden beneficiar a Pina.

Eso sí, también espero que no mientan, porque ya hemos oído que me había comprometido a darles la Delegación de Fiestas y luego no se la di, cosa bastante improbable, puesto que una de las cosas que con más insistencia nos había pedido mucha gente, incluso no votantes de CHA ni de PSOE, fue que el PP no llevase esa concejalía.

De hecho, todavía a día de hoy, 22 de julio, nadie me ha dicho que debería llevar Fiestas alguien del PP. 

Y para terminar con el tema de fiestas, además de agradecer a Victoria Calzada que se haya hecho cargo de la delegación, me gustaría explicar algo:

La semana que viene tenemos que hacer una modificación del presupuesto en lo relacionado con la partida de fiestas porque no tenemos con qué pagar todo lo básico que nos hemos encontrado sin organizar para agosto. Esa ha sido la razón por la que las fiestas duran hasta el martes y hay dos días de vacas. Esa, el dinero, y ninguna más.