Blogia
Desde Pina: el blog de Marisa Fanlo Mermejo

EL VIDAL MAYOR VUELVE A ARAGÓN

EL VIDAL MAYOR VUELVE A ARAGÓN

[...] hace un par de años Chunta Aragonesista organizó una expedición de visita a Valencia para, en el marco de una exposición, poder contemplar el Vidal Mayor, manuscrito iluminado del siglo XIII, que supone la primera recopilación y sistematización de los Fueros de Aragón. El interés de este texto no estriba sólo en la hermosa factura de sus miniaturas y caligrafía, ni de su extraordinario valor filológico (está escrito en aragonés medieval), histórico y jurídico, sino en el hecho trascendental de ser el arranque de uno de los pilares del sistema constitucional antiguo de Aragón junto con el Justiciazgo, las Cortes, la Diputación del Reino y la teoría política del pactismo desarrollada por los jurisconsultos que formularon las Observancias y los cronistas que elaboraron el mito del Fuero de Sobrarbe.

Esta pieza -que siendo en sí una joya como objeto de arte, lo es todavía mucho más para los aragoneses desde otros puntos de vista- salió de nuestro país hace más de un siglo como consecuencia de la desidia del pasado y sigue sin retornar a él gracias a la desidia de los que nos gobiernan en el presente. No obstante, Ibercaja ha conseguido traerlo, siquiera temporalmente, a Zaragoza en el marco de la exposición "Encrucijada de Culturas" que estará ubicada en La Lonja hasta el 9 de septiembre. Merece la pena que os traslademos algunos datos de esta primera compilación de los Fueros de Aragón para que, conociendo a fondo su significación para la conformación de la identidad nacional de Aragón, os animéis a visitar la exposición y a contemplar este maravilloso libro con una mejor comprensión de lo que tenemos delante.

Tras la conquista de Valencia (1238) y la creación del Reino del mismo nombre, Aragón ve cerradas sus posibilidades de continuar con su expansión territorial y de tener acceso territorial al mar. Es un momento en el que el país debe concentrarse en sí mismo y dedicarse a organizar sus leyes e instituciones para gobernarse como un Estado estable y no como una sociedad esencialmente volcada sobre las empresas militares de la Reconquista. La pretensión del Rey Jaime I fue la de compilar el derecho indígena aragonés, disperso en diferentes fueros, y codificarlo, sistematizarlo y unificarlo en todo lo posible para, sobre esa base, ir haciendo una transición hacia la creación de un sistema jurídico ajustado a los principios del Derecho común romano canónico. Esta pretensión era importante para el Rey, pues el Derecho romano era invocado por los reyes del momento para tratar de afianzar la legitimación de su autoridad suprema, a menudo bastante precaria, sobre los poderes de nobles y concejos, principalmente. Por esa razón, encargó a un prestigioso jurista, formado en Derecho romano en la Universidad de Bolonia (la gran escuela europea por excelencia de esta disciplina) la ejecución de esa tarea: el obispo de Huesca, Vidal de Canellas.

Vidal de Canellas hizo un excelente trabajo, organizando los fueros de Aragón en una serie de 9 libros, imitando la sistemática del Codex del emperador Justiniano, y tratando de adaptar el derecho secular aragonés a los preceptos de la tradición latina. Sin embargo, su promulgación por las Cortes de Aragón reunidas en Huesca en 1247 no estuvo exenta de polémica, pues existió una férrea oposición, liderada por la nobleza aragonesa, a aceptar las teorías romanistas y cesaristas que se pretendían introducir, hasta el punto de que incluso prevaleció el término "fuero" sobre el de "ley" o "derecho" a la hora de referirse a la normativa aragonesa.

El empeño de Jaime I fracasó, pero en su intento consiguió llevar a cabo una uniformización muy extensa, ya que no completa, del ordenamiento aragonés. De hecho, esta compilación tiene dos versiones: la Compilatio minor, más adaptada a los deseos de la resistencia aragonesista frente al Derecho romano, que fue la que finalmente se consideró vigente en Aragón hasta 1707, y la llamada Compilatio maior (de ahí la denominación que también se le da de "Vidal Mayor"), versión más próxima a las pretensiones iniciales del monarca, que es la que recoge el hermoso códice que podemos contemplar ahora en la Lonja de Zaragoza.

A partir de este momento, los Fueros de Aragón se fueron reformando y completando a través de los siglos en diferentes reuniones de las Cortes, siendo el núcleo esencial del sistema constitucional aragonés junto a las Observancias, Libertades y Actos de Cortes, y revestidos por el aparato ideológico político del pactismo. Es ese Derecho nuestro que constituye, junto con el hecho histórico de nuestra realidad y nuestra voluntad de ser lo que somos, la base de la identidad nacional de los aragoneses.

Disfrutadlo

Miguel Martínez Tomey

Secretaire de Politica Cultural e Identidá Nazional de Chunta Aragonesista

0 comentarios